LOS INMIGRANTES, GENTES DEL MUNDO


          Cierto es que el fenómeno de la inmigración no está exento de problemas, pero nos guste más o menos todos tenemos una opinión al respecto. Unos a favor, otros en contra, pero pocos indiferentes.


          Si hiciéramos una encuesta estoy totalmente convencido de que el 99,9% de los encuestados se posicionarían a favor del " inmigrante" y de la solidaridad con ellos, pero la realidad es bien distinta. En las noticias, todos lo días vemos y leemos sucesos poco afortunados de los extranjeros que viven en nuestro país pero pocas veces oímos , leemos o visualizamos los esfuerzos que éstos deben hacer para, primero decidir salir de su tierra y dejarlo todo, y segundo tener la tremenda suerte de ser aceptados por nosotros y conseguir una cierta integración..


          Los llamados "panchitos" vienen a "quitarnos el trabajo"; los "moros" no se adaptan a nuestra sociedad y queremos que sus costumbres religiosas y sus vestimentas sean como las nuestras; los "chinos" están destruyendo el mercado y el comercio español pues "no pagan impuestos"; los rumanos sólo saben ir pidiendo por la calle en vez de trabajar; los negros.........bueno, los negros es que son negros y ya está. 


          Debe ser muy complicado llegar a un país con el que has soñado tantas y tantas veces para conseguir un futuro para tus hijos y encontrarte con esta situación. Deben dar ganas de volver por donde has venido. Deben dar ganas de ponerse a llorar y dormir para que nunca más amanezca.


          Y en cierto modo en algunos casos podemos tener razón; el ecuatoriano que ha matado a su mujer, el rumano que ha robado en el bar de la esquina, el chino que no te sonríe cuando vas a comprar a su tienda, el marroquí que habla en árabe y no lo entiendes...........Excepciones hay en toda la especie humana, ya sean inmigrantes o no; pero a nosotros nos resulta más fácil hacerles el feo por el simple hecho de ser de "fuera". Lo creamos o no esos casos son una inmensa minoría, pero desafortunadamente son en los que más nos fijamos.


          ¿Nunca os habéis parado a pensar en cómo sería si algún día nos parásemos a hablar con ellos y les preguntáramos realmente lo que piensan de nosotros y si puedes ayudarles en algo? Sinceramente no es tan complicado. 


          Nuestros abuelos emigraron a otros países en busca de dinero para asegurarnos un futuro mejor, y nadie los tachó de inmigrantes violadores de culturas. Hoy muchos ciudadanos españoles también están buscando trabajo fuera de nuestras fronteras debido a los altos índices de paro que hay en nuestro país y debido a la crisis económica, mañana puedes ser tú el que te sientas repudiado en un país que no es el que te vio nacer.


          Nos guste o no, el futuro es multicultural y nuestras generaciones futuras irán al colegio y se criarán con niños y niñas de otras razas y otras costumbres. Es cuestión de tiempo y de concienciación, por ello si queremos que nuestro futuro sea más prometedor, hagamos de la integración, siempre que no se violen los Derechos Humanos, nuestra bandera.  Nuestros hijos nos lo agradecerán.